El placer de contemplar

Miércoles cuatro de mayo

tuve el enorme privilegio

y la suerte de presenciar

en vivo y en directo,

en el Palacio de Camarena

la conferencia inaugural

El Placer de Contemplar.

 

A cargo de Joaquín Araujo

naturalista y escritor prolijo,

todo un homenaje al templo de la vida

y a la naturaleza que nos rodea.

 

Abrir el alma y los sentidos a la naturaleza

es la propuesta que nos plantea,

de una forma poética

con todo lo que implica en nuestra existencia.

 

Aprender con nuestros sentidos

para poder aprender de su significado,

la contemplación es disfrutar de este espectáculo

ya que si un paisaje no se vive es un paisaje muerto.

 

Este orador magnífico

es el Rodríguez de la Fuente extremeño,

nos atalantó de un excepcional modo

con sus brillantes chisporroteos.

 

Como unos fogonazos para hacernos recobrar la vista

de una forma muy amorosa pegada a la naturaleza,

en un tono altamente lírico

en el que abundan los haikus, la mística telúrica y lo filosófico.

 

Hace que buceemos en el fondo de la naturaleza

como del alma humana,

un lugar que nos enlaza rico en sabiduría

para desobedecer todo lo demás

y a obedecer la belleza.

 

Estos brillantes chisporroteos

precedidos de pequeños ensayos,

sobre las relaciones de nuestros cinco sentidos

con las causas que nos permiten usarlos.

 

En definitiva

propone que no nos perdamos del todo,

perdiéndonos el más bello espectáculo del Universo

que es la vida y sus mansiones en la Tierra.

 

Esta conferencia inaugural

tuvo una duración de una hora,

que se hizo muy corta

al ser tan amena y enriquecedora.

 

Al feliz termino

nos obsequió con un pequeño regalo,

un queso de untar y de vino una botellita

todos productos de la tierra.

 

Adquirí tres de sus libros

y en riguroso orden y concierto,

me dedico cada una de sus obras

firmados con su puño y letra.

 

Joaquín Araujo, aunque madrileño de nacimiento

tiene su residencia en terrenos cacereños

concretamente en la comarca de las Villuercas,

donde vive rodeado de naturaleza

y dedicado al placer de contemplar

de esta zona su riqueza natural.