miércoles, 18 de noviembre de 2015

El don de la palabra


El don de la palabra

es lo que a mí me hace falta,

para poder expresar en vivo y en directo

todos los sentimientos que llevo dentro.

 

El redactarlos y escribirlos

me cuesta bastante menos,

será que me traicionan los nervios

por el miedo escénico al directo.

 

Subirme al tablao o a un pulpito

delante de tanto público,

es algo que me da verdadero pánico

me dan sudores y escalofríos.

 

Cuando veo a los grandes oradores

con ese don de recitadores,

me entra una envidia sana

de subirme a recitar me entran ganas.

 

Pero una cosa es predicar

y otra dar trigo,

porque en un desierto predicar

es sermón perdío.

 

El don de la palabra

toda mi vida tiene esta carencia,

desde mi infancia y adolescencia

hasta mi juventud y ahora que paso de los sesenta.

 

Estas son mis vivencias

sobre la muerte, como dice Antonio Gala,

me gustaría ser recordado

como alguien que murió vivo.
 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Translate